miércoles, 27 de febrero de 2013

Día de Andalucía. Recitamos poemas y representamos una obra teatral.



En nuestro centro celebramos el día de Andalucía de una manera especial. Subimos al cerro Jabalcón y allí tomamos un típico desayuno andaluz.

También tenemos tiempo para rescatar juegos populares y otras actividades como, por ejemplo, un concurso fotográfico. Son magníficas las instantáneas que podemos conseguir fotografiando el paisaje que nos rodea.

Ojo de la Heredad
Ya se ha convertido en una tradición que encanta a nuestros escolares y sabemos que muchos de los alumnos y alumnas, que ya abandonaron nuestro dentro, echan de menos este día.

Pero antes de esta actividad el alumnado de 1º de ESO se reunió en la biblioteca de nuestro centro para mostrar el trabajo que llevábamos realizando desde días antes.


Comenzamos colgando en el tablón un mapa literario de Andalucía. Trabajando en equipo, el alumnado confeccionó un mapa literario de Andalucía. Cada grupo se encargó de una provincia y elegía un poeta que la representara. Rellenaban el gigante mapa mudo con una poema, una imagen y la biografía del autor elegido. ¡Había escritores de todas las épocas! Desde Luis de Góngora (Córdoba) hasta el actual compositor Joaquín Sabina (Jaén) pasando por Juan Ramón Jiménez (Huelva), Antonio Machado (Sevilla), Francisco Villaespesa (Almería), Federico García Lorca (Granada), Emilio Prados (Málaga) y Rafael Alberti (Cádiz).

Los chicos de Refuerzo de Lengua representaron dos obras de teatro geniales. En ellas reproducían los distintos rasgos de las hablas andaluzas y explicaban algunas de nuestras expresiones más autóctonas. Fue un momento muy divertido y enriquecedor.

Acabamos la sesión oyendo recitar de una manera formidable a alumnos y alumnas que, en su investigación para realizar el mapa literario, habían descubierto poemas que hablaban de Andalucía. Nos quedamos con este poema de Ángeles Asensio que, aunque nació en Teruel, se siente andaluza y le encanta nuestra tierra. Podemos saber más de ella y de su obra visitando su blog.


Un embrujo de folclore y color... Sembrado al sur, 
un mezclarse entre volantes con los duendes de alegría 
donde el llanto se hace cante, y cantando su agonía, 
baile y copla, risa y llanto, al son de las castañuelas, 
mezcla un concierto de palmas con la luz de las candelas 
y este ritmo se hace danza ¡En todo el pueblo andaluz!.

Jaén; tierra de olivar... De llano seco y colina, 
de vientos que han retorcido los troncos con la sequía; 
de perlas hecha aceituna -milagro de verde oliva- 
con suave tacto y aroma, aceite que se rocía 
como líquido cremoso de mejor gastronomía, 
y orgullo de un campesino que le dedica su vida.

Besando el Guadalquivir, mi Córdoba se levanta; 
artesanía de calles y rinconcito con plaza,
blanco de cal es el fondo de sus macetas colgadas. 
En la Plaza de la Concha -como un pañuelo de ancha- 
luce un farol en su calle que en la noche se destaca, 
y el murmullo de la fuente que al silencio te reclama.

Para conocer Sevilla ¡Hay que beber manzanilla 
y visitar Santa Cruz o Plaza de Doña Elvira!, 
vestirse de faralaes en su feria tan castiza, 
llevar en Semana Santa una peineta y mantilla. 
Es tierra de señoritos, alazanes, romería, 
de patios con muchas flores... Rejas, cortijo, ¡alegría!

Cádiz es puerto de mar, donde dos mares se abrazan,
situado en la bahía del "pescaíto" y las barcas, 
un baluarte en los castillos configura sus murallas 
si el viento levanta el mar... El sol de nuevo lo calma. 
¡Al Sur de mi Andalucía -en esa punta de España- 
mi "Cai" canta en sus murgas la verdad de lo que pasa!

Donde está el Cabo de Gata tiene la costa Almería; 
arrecife, acantilados y una Alpujarra con vistas. 
Contrastan con su desierto montes, valles y campiñas, 
almenas escalonadas en las torres se divisan. 
Si tapeas, hay jureles, delicioso pulpo y chirlas.
No encontrará lo que busca aquel que no la visita.

A Málaga de vacaciones, pasearse por la playa 
y comer los boquerones pescados de madrugada. 
Tiene un barrio musulmán cerquita de la Alcazaba, 
que es el más antiguo barrio que se conserva en España. 
Noches de discos y coplas, de movida, de jarana, 
salir al anochecer y volver por la mañana.

Y a mi Huelva marinera... La del Rocío y marisma 
le ves los barcos venir al amanecer del día. 
Es la del Parque de Doñana, ¡es la del choco y coquina!, 
es la de tres carabelas y una brújula de guía 
saliendo hacia el horizonte, María, Pinta y la Niña, 
para entregarle a Colón el sueño de su conquista.

Y Granada... ¿Alguien nos sabe decir cómo es Granada? 
¿Quién te puede describir su amanecer en la Alhambra? 
La nieve que hay en los montes... ¡O esa etnia tan gitana 
que le dio a Sacromonte en todo el mundo la fama! 
¡Y cómo explicar que el sol cuando ya el día se acaba... 
va derrochando el color y la viste de naranja!

jueves, 14 de febrero de 2013

V Concurso de poemas de amor y desamor "Quien lo probó, lo sabe"

Este año el Concurso de poemas de amor y desamor "Quien lo probó, lo sabe" ha sido un nuevo éxito. Son muchos los alumnos y las alumnas que se animaron a escribir y desde aquí pido que añadan como comentario su poema o carta de amor (o desamor).

Pero San Valentín ha dado mucho más juego en nuestro centro. El alumnado ha disfrutado del Buzón Rojo, un servicio especial de correos para intercambiar mensajes especiales propios de esta fecha.

Además, tras haber estudiado la Publicidad y su lenguaje, los chicos y chicas de 4º de ESO se convirtieron en publicistas y confeccionaron una serie de carteles que promocionaban unos productos que vendían para recaudar fondos para su viaje de estudios. La experiencia fue extraordinaria y su trabajo fue expuesto oralmente por cada grupo fenomenalmente.

 



Para celebrar este día de San Valentín vamos a recordar un soneto amoroso de Francisco de Quevedo. En él aparece una serie de metáforas encontradas haciendo un continuo juego de contrarios. Así define Quevedo el amor.




Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente,

es un soñado bien, un mal presente,
es un breve descanso muy cansado.

Es un descuido que nos da cuidado,
un cobarde con nombre de valiente,
un andar solitario entre la gente,
un amar solamente ser amado.

Es una libertad encarcelada,
que dura hasta el postrero paroxismo;
enfermedad que crece si es curada.

Éste es el niño Amor, éste es su abismo.
¡Mirad cuál amistad tendrá con nada
el que en todo es contrario de sí mismo!